Leyes básicas de la estupidez

Una definición de la inteligencia que deberíamos promover

Estas leyes de Carlo M. Cipolla (1922-2000, historiador económico y profesor de las universidades de Pavía, Berkeley y de la London School of Economics), deberían ser enseñadas desde la educación básica, porque además de ser útiles, tienen una consecuencia moral.

En esta breve reflexión, Cipolla clasifica a las personas en cuatro categorías, de acuerdo al efecto de sus acciones:

  1. Aquellas que benefician a los demás y a sí mismos,
  2. Las que benefician a los demás y se perjudican a sí mismos,
  3. Las que perjudican a los demás y se benefician a sí mismos y
  4. Las que perjudican a los demás y a sí mismos.

A los primeros los llama inteligentes porque no dañan a nadie, sus acciones benefician al resto y a sí mismos. Son los mejores, ojalá todos nuestros líderes políticos y empresariales estuvieran en esta categoría.

Trata de ingenuos a los segundos porque muchas veces son víctimas de engaños en que salen perjudicados en beneficio de otros.

Define como bandidos a aquellos que obtienen beneficios a costa de perjudicar a otros. ¿Se le ocurre algún ejemplo?

Dice que los peores son los estúpidos porque a través de sus acciones perjudican a los demás y a sí mismos, simultáneamente.

Observe que

  1. Cipolla considera mejor a un bandido que a un estúpido porque, al menos, produce el beneficio para sí mismo.
  2. Para que exista un ingenuo engañado debe existir un bandido perpetrador, pero no al revés. Los bandidos pueden producir daño a terceros en contra de su voluntad.
  3. Seguramente Cipolla se refería a beneficios económicos, aunque su hipótesis podría extenderse a otros ámbitos.
  4. No somos inteligentes o estúpidos siempre. Cada decisión que tomamos es inteligente, ingenua, malintencionada o estúpida. Siempre se puede cambiar.

Esta reflexión, tan simple y tan profunda, me parece sumamente útil para no caer en futuras trampas propias y ajenas, nos ayuda a pensar, evaluar y a clasificar las acciones y decisiones que enfrentamos todos los días.

Agrega Cipolla algunos principios a tener en consideración:

  1. Siempre e inevitablemente cualquiera de nosotros subestima el número de individuos estúpidos en circulación.
  2. La probabilidad de que una persona dada sea estúpida es independiente de cualquier otra característica propia de dicha persona.
  3. Las personas no estúpidas siempre subestiman el potencial dañino de la gente estúpida; constantemente olvidan que en cualquier momento, en cualquier lugar y en cualquier circunstancia, asociarse con individuos estúpidos constituye invariablemente un error costoso.
  4. Una persona estúpida es el tipo de persona más peligrosa que puede existir.
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2 Respuestas a “Leyes básicas de la estupidez

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  2. Creo que la estupidez esta relacionada con la ignorancia, es decir, gente que no se informa y tanpoco saca susn propias conclusiones de una determinada situacion politica, economica o de culaquier tipo, se queda con comentarios ajenos que tampoco analiza por comodidad y falta de interes de aprender y tambien por comodidad es mas facil ser ignorante

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